A lo imposible nadie está obligado.
Máxima jurídica que permite dejar exento de responsabilidad jurídica ante el incumplimiento de cierta disposición legal, convencional o jurídica, siempre y cuando se trate de una obligación de imposible concreción o cumplimiento. Es decir, que este aforismo jurídico tiene que ver con la imposibilidad de cumplir una obligación.
Lo anterior viene del hecho de que tal y como señala el Dr. Luis Javier Moreno Ortiz: “Si lo imposible no puede ser, resulta obvio que deber serlo o deber hacerlo tampoco puede ser.
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