El derecho administrativo es la rama del derecho público que estudia la organización, deberes y funciones del Estado, además de sus instituciones. Este tipo de derecho sostiene un objetivo doble: el de garantizar la eficacia de la administración pública y los diversos procesos involucrados, así como la protección de los derechos de los particulares o ciudadanos (administrados) en sus relaciones con dicha administración pública.

En otras palabras, la esencia del derecho administrativo es la defensa de los derechos de los ciudadanos en sus distintas relaciones con la administración, y a su vez de la racionalización del ejercicio del poder público en beneficio de la colectividad.

La administración jamás debe de tener fines individualistas, sino que es una institución que se debe únicamente por y para el ciudadano, buscando siempre actuar para satisfacer los intereses generales o públicos, por lo que, cuando en aras de la administración cumplir esa misión, atropella o vulnera los intereses y los derechos de los ciudadanos, es que oficinas como la nuestra se ven en el marco del deber de asumir la defensa de todos aquellos, cuyos derechos se encuentran atrapados en la discrecionalidad injustificada, arbitraria e ilegal de la administración pública, es cuando con valor y grandes capacidades de la técnica jurídica buscaremos asegurar a toda costa que le sean garantizados todos y cada uno de los derechos que le pertenecen al ciudadano, obteniendo resultados satisfactorios.